Sobre la ex hacienda de La Pila (patrimonio de los Siglos XVIII y XIX); localizada en la zona poniente de Toluca, se decidió construir un centro cultural estatal; convirtiendo el casco de la hacienda en el Museo de Culturas Populares y Charrería, y adaptando un edificio originalmente concebido como planetario para convertirlo en el Museo de Arte Moderno Estatal. Complementa el complejo cultural la Biblioteca Estatal y el Museo de Antropología, éstos diseñados por el arquitecto Pedro Ramírez Vázquez.
El espacio del vestíbulo del Museo de Arte Moderno se contiene con un maravilloso mural de 22 metros de largo a base de piedra basáltica tallada, obra del maestro Nishizawa, titulado “El Lecho del Universo”.
La intención urbana de crear este polo cultural en el extremo oeste de la ciudad busca contrarrestar la tendencia actual de crecimiento al este.
GDU estuvo a cargo de la restauración y readaptación de la ex hacienda en los museos mencionados, así como el proyecto del Museo de Arte Moderno (en colaboración con el arquitecto Gonzalo Gómez Palacio). La gran Plaza Central está inspirada en el complejo de ruinas prehispánicas de Teotenango que asciende hacia el Nevado de Toluca como eje rector del conjunto. Al centro de la Plaza se diseñó un espejo de agua con piedras basálticas de enormes dimensiones que rememoran las estelas prehispánicas (en colaboración con el maestro Luis Nishizawa).